Bienvenidos a Primiparear= Bienvenido Sr. Miedo.

Hoy más que hablarte de algún tema de sueño, quiero hablarte de algo que se vuelve cotidiano al ser papás y es : el miedo.

Miedo ante las constantes situaciones a las que nos vemos expuestos los papás al ser primíparos y al todo ser tan novedoso y retador cuando tenemos en nuestras manos la responsabilidad el mantener sano y salvo a ese pequeñito.Mas que un blog de como manejar la preocupación y el miedo constante a todo, porque hoy 28 meses después sigo sin saberlo y creo que definitivamente es una situación permanente , quiero hablarte de los miedos que he tenido en este tiempo y que tal como dicen las abuelas, todo llega y todo pasa.

Mi primer miedo fue a no saber como cuidar su ombligo, mi esposo me decía , estoy tranquilo, tu eres médico, sabes cómo manejarlo y siento que eso generaba una presión adicional en mí, una cosa es manejar a mis pacientes en un ámbito clínico, otra cosa es tratar de ver a mi hijo como paciente, así que descance cuando esa mañana se despertó, me disponía a cambiar el pañal y el “ombligo “ se cayó y estaba perfectamente seco ( gracias Dios).

De aquí seguí con el miedo a asegurarme de que comiera para que no se bajara de peso ( es normal que baje de peso las primeras semanas) pero que no llegara más allá al punto de requerir ser hospitalizado.Ni hablar de los miedos a las visitas por los virus respiratorios, a esos primeros baños, a pasar la noche con la luz completamente apagada , al primer reflujo , a comprender los cambios de color de popis , a sus primeras, segundas, terceras vacunas , al miedo a dejarlo al cuidado de otra persona cuando mamá tiene que salir y aquí podría seguir….

Sin embargo mi mensaje para ustedes es que todo pasa y que así sea su primer bebé en verdad hay algo desarrollamos los papás, llámalo sexto sentido, Dios, los ángeles, corazonada, pero es eso que te deja saber lo que tu bebé necesita en el momento justo.

Se fiel a esa voz de tu corazón que te lleva a vigilarlo una vez más en la noche, a cargarlo de nuevo, a revisar si no quedo un gas de más , a ser firmemente amoroso cuando el caso lo amerite , esa voz nunca fallará .